Blog del escritor Andrés Casanova: EL DRAMATIZADO RADIAL EN INTERNET: El mecánico

En este dramatizado radial concebido para ser representado por actores profesionales, expongo cómo un mecánico al llegar a la vejez ya no es capaz de realizar trabajos a los que antes estaba habituado. Pretendo así una generalización al hecho de que, en cualquier profesión u oficio, si el individuo se niega a aceptar que envejece de todas maneras la propia vida se encargará de convencerlo de su error.

Aclaración constante:

Para mí, el dramatizado radial ha significado no sólo vía de supervivencia, sino además una forma de promover mi obra literaria, específicamente con cuentos de mi autoría. Estoy escribiendo desde el año 1990 originales para el medio radial, aunque también he adaptado cuentos originales míos publicados con anterioridad en formato de texto impreso.

En esta sección o categoría, les ofreceré una selección de los grabados por el grupo dramático de la emisora Radio Victoria. Los cuentos escenificados por los actores podrán descargarlos en formato de audiolibros como videos desde mi canal en Youtube o bien como audios solamente que son menos pesados electrónicamente desde mi canal en Google Drive.

A pesar de mi interés como creador literario de promover mi obra personal, desconozco si realmente al menos UN internauta estará disfrutando el resultado de mi trabajo, por lo que pudiera ser que termine este año con esta sección de mis blogs y me dedique a otras actividades más productivas para mí.

MIS INTENCIONES CREATIVAS AL CONCEBIR

El mecánico

Desde mi experiencia de hace muchos como Ingeniero Mecánico antes de dedicarme al campo de la cultura, observaba cómo personas que bordeaban la ancianidad se empeñaban en mantenerse activos laboralmente a pesar de faltarle fuerzas para realizar ciertas labores.

Sé que quien se jubila es descartado de la vida social, por más alharaca positivista y discursos optimistas a favor de lo que post-modernamente se llama la tercera edad y que antes, más mondamente y sin aires eufemísticos se le llamaba vejez.

Es quizás la lucha contra el olvido lo que conduce a las personas a mantenerse activos laboralmente, sin descartar las necesidades económicas, pues ningún régimen social regala nada: todo lo material hay que adquirirlo con dinero.

En medio de este sistema de pensamiento, coloco a mi personaje protagónico de El mecánico, quien al llegar a la edad de 75 años se niega a jubilarse, lo que impide que un joven capacitado ocupe su plaza laboral, por lo cual de no resolverse el conflicto el joven tendría que irse del taller. Varias personas razonan con el anciano hasta que él mismo por un percance que le ocurre decide jubilarse.

El montaje de las escenas lo realicé con las tramas siguientes:

Escena 1: Pedrín le brinda su ayuda a Juancito de manera respetuosa y este reacciona violento, con odio. Se plantea que la razón principal es que Juancito no pretende jubilarse a pesar de tener 74 años. Se conocen algunos antecedentes personales acerca de ambos personajes.

Escena 2: Alonso está cerca y trata de detener las ofensas de Juancito contra Pedrín. Juancito la emprende contra Alonso, reiterando su decisión de no jubilarse.

Escena 3: Alonso se queja ante Manolo por las ofensas y la mala actitud de Juancito. Manolo se siente maniatado. Los mismos personajes dan a conocer los cargos que ostentan en el taller. En cuanto a la consideración que le tienen a Juancito, es buena desde el punto de vista profesional por parte de ambos; sin embargo, el jefe del taller aquí lo conceptúa como engreído. El del sindicato como muy capaz. Ambos juzgan que ha perdido facultades como mecánico por la vejez. Pero no se atreven a presionar a Juancito para que se jubile.

Escena 4: La escena transcurre en la casa de Juancito y Aleida. Planteo del conflicto existente en el taller desde el punto de vista de Juancito, quien considera que resulta injusto que quieran que se jubile para acomodar a Pedrín en su plaza de mecánico. En esta escena Aleida está de acuerdo con él. Hasta ahora, la única razón que se alude es que Juancito se considera útil todavía, aunque también está la rabia que siente porque el joven ocupe la plaza suya.

Escena 5: Pedrín va en horas de la noche a casa de Manolo, ante quien se queja de los maltratos que sufre de parte de Juancito y manifiesta su intención de ripostarle con violencia; Manolo se lo prohíbe. Aquí contradictoriamente a la escena 3, el jefe de taller no conceptúa a Juancito como engreído, sino como profesional a quien hay que respetar por sus méritos: es una contradicción propia de los seres humanos valorar a una persona de manera diferente en dependencia del contexto. Pedrín se le encara a Manolo. Manolo impone su autoridad de jefe. Al final el propio Manolo rebaja las tensiones entre él y Pedrín siendo menos severo.

Escena 6: Pedrín a pesar de su juventud decide recurrir al diálogo con Juancito. Sin embargo, la respuesta final de Juancito resulta agresiva y están a punto de irse a los puños cuando se escucha el griterío de otros dentro del taller y la carrera apresurada de dos que se acercan.

Escena 7: La llegada de Manolo y Alonso evita la casi segura pelea entre Pedrín y Juancito. Pedrín accede a retirarse a petición de Manolo, aunque advierte que reclamará judicialmente la plaza laboral. Por su parte Juancito lo amenaza.

Escena 8: Durante la conversación privada entre Manolo y Alonso con Juancito, se pone de manifiesto que la intención del viejo mecánico es no jubilarse jamás.

Escena 9: Esa misma noche Juancito conversa con Aleida en la casa. Se pone de manifiesto el concepto de Juancito: la lucha intergeneracional. Entiende que los jóvenes desean arrollar a los viejos. Esgrime un hecho particular generalizándolo. Alude a ciertas realidades que trae aparejadas la jubilación. Aleida, que ahora comprende la conveniencia de que Juancito se jubile, le expone alternativas para paliar tales realidades. Por otra parte, ella tiene un concepto acerca de los jóvenes diferente al de Juancito.

Escena 10: Pedrín conoce el ingreso hospitalario repentino de Juancito y por una cuestión humanitaria decide i a visitarlo.

Escena 11: Llegada de Pedrín al hospital donde se encuentra ingresado Juancito. Lo reciben con respeto. Sin embargo, no por ello deja de existir un rechazo aunque de baja intensidad por parte de Juancito. Aleida trata de calmar a Juancito, pero es Pedrín quien admite que vino a zanjar las diferencias entre él y Juancito. Aleida pasa a ocupar un primer plano momentáneo, tratando de persuadir a Pedrín de que no abandone el taller. Finalmente, quien renuncia es Juancito a favor de Pedrín.

EL MEDIO FABULAR DONDE UBIQUÉ LA TRAMA

La parte fundamental de la trama ocurre en un taller de mecánica en mi ficticia Punta Martinas, ciudad cubana que yo cree fabularmente hace años y que aparece en cuentos y novelas míos publicados e inéditos. Este taller concebido para solucionar la atención al transporte público es además escuela-taller para desarrollar a los nuevos obreros procedentes del tecnológico municipal. En dicho taller convergen tres generaciones cuyo conflicto esencial es el rendimiento laboral.

En este medio, Juancito llega a la edad de 75 años negándose a jubilarse, lo que impide que Pedrín ocupe su plaza laboral, por lo cual de no resolverse el conflicto el joven tendría que irse del taller. Varias personas razonan con Juancito hasta que él mismo por un percance que le ocurre determina dejar su plaza libre para que sea ocupada por Pedrín.

Por cuestiones convencionales de la radio cubana, he edulcorado algunas escenas luego de transcurrir otras de elevado rango emocional y conflictivo, pero por mi experiencia personal no siempre los conflictos laborales que ocurren en los centros de trabajo cubano actuales son resueltos con tanta armonía.

No obstante, como el realismo literario no tiene que coincidir con el realismo real, considero verosímil y por tanto funcional la trama del presente cuento: juzgue el potencial oyente, si es que encuentro alguno.

FUNCIÓN ACTANCIAL DE LOS PERSONAJES CREADOS POR MÍ

Advierto a partir de ahora a los posibles oyentes de mi relato dramatizado que en ocasiones, debido a cuestiones de la producción radial en el momento de la grabación o bien, por acuerdo entre el realizador y yo, determinamos trasladar algunas funciones actanciales de determinado personaje a otro. No obstante, yo siempre les brindo todos los personajes concebidos por mí durante la creación tal como aparecen en el guión literario puesto que preparo un trabajo futuro sobre escritura de guiones donde pretendo evaluar, entre otros aspectos, la relación existente entre guión literario y guión realizado.

1. JUANCITO: Mecánico de excelente trayectoria laboral y técnica, pero que ya no es capaz de resolver dificultades a los vehículos tanto por escasez de visión como por movilidad un tanto perdida y frecuentes dolores en el pecho. Severo, exigente.

2. PEDRIN: joven que al regresar del cumplimiento del Servicio Militar General cubano es ubicado en el taller de mecánica en una plaza de inferior categoría a pesar de ser graduado del tecnológico municipal. Trae referencias de mecánico talentoso. Serio y organizado. Cumplidor.

3. MANOLO: jefe del taller que entra en discusiones a veces agrias con Juancito tratando de convencerlo de que se jubile.

4. ALEIDA: esposa de Juancito que como él, al principio está contra la jubilación del marido. Ama de casa.

5. ALONSO: Mecánico A que fue el tutor de Pedrín cuando era estudiante y defiende la inserción laboral del joven. Fue discípulo de Juancito. Es el secretario de la sección sindical.