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Selección de poemas de varios libros inéditos

 

del autor

ANDRÉS CASANOVA

 

 

 

ODA A LOS TORNILLOS

 

Vuelta y más vueltas de los tornillos que nacen como dedos

donde los fogones son lentos y advierten:

“Cuidado con el tigre” o “estamos en la bajada de la cruz”.

Porque nos pierde la añoranza de los días fracturados

y las sonrisas retornan a la izquierda

hacia las zonas del olvido.

Solamente los tornillos vencen en la redada.

 

(De Cuaderno de bitácora y otros olvidos) 

 

 

 

I

 

Va ebrio de alegría el pequeño

quizás creyendo que mi edad como la suya

aún alimenta dulces esperanzas en forma de pasteles.

 

Salta mi niño por la cuerda que pesca

desde un portal enrejado hasta la calle

cuantos monstruos marinos invento

para su inexistente anzuelo.

 

Pesca mi nieto sin saber que las rimas

no valen más que dos canciones

y en sus sueños de azúcar e inocencia

todavía desconoce los llantos del futuro.

 

 

 

IX

 

Abnegados aurigas

conducen la matanza

del hidalgo que luce

un escudo intocable.

 

Aurigas tremolantes

en amargas victorias

condenan al esclavo

negado a obedecer.

 

Tales aurigas fieros

no son aves de paso

sino fieras sin nombre

 

que van hasta el andén

donde mueren libertos

por su propio dolor.

 

(De Cantos por un futuro)

 

 

 

¡AY DEL SOLO!

 

Ay del que la soledad le muerde los talones

y encuentra en cada piedra un enemigo.

Pobre del que amanece en el desierto

añorando cantos de sirenas.

Maldígase quien va buscando espacios

y las serpientes vienen a morderlo.

Desaparezca detrás de sus propias espumas

aquel que agotado de tanto andar cree todavía en espejismos.

La muerte le grita desde cualquier esquina

al que harto de mentiras busca verdades intangibles.

 

Tropieza con el cruel enemigo de los corazones

el adalid de batallas contra el aire.

 

Al solo no lo escuchan

le gritan obscenidades hasta en los márgenes de las nubes

lo apedrean cuanto intenta guiar al ciego

en medio de tantas calles empedradas.

 

El solo emite quejas y lo toman por loco.

El solo no calma la sed con agua dulce.

El solo es arrojado a puntapiés de sus historias.

El solo masca hiel cuando pide la paz y la distancia.

El solo no tiene siquiera un costado donde echar su llanto.

El solo es condenado por sus propios defendidos.

 

El solo sólo tiene una esperanza:

que un día en su vida se encienda el Lucero de la Aurora.

 

 

 

DESTINO

 

Soy zurdo

                  y no me creo

un adalid de la historia sino más bien

el judío errante que ya no adivina los caminos de la gloria.

 

No merezco

                  aplausos por mis acciones

pues lo que hago con mis manos

mis sueños lo deshabitan

porque perdí los caminos.

 

Soy diestro

                  para escribir

la memoria que se estanca

con la derecha encasillo la verdad

y miro

hasta dónde la mentira me convirtió en pordiosero.

 

Cuando miento

                  el quehacer

en mis días se fracciona

transformándose en teorema

lo que fue una pobre burla.

 

Vamos a ver

                  si tus perros

que muestran cortantes dientes

con sus indigentes odios

son capaces de tragar

los sueños que no he soñado.

 

Entonces ya vencedor

                  voy a la luna y me pierdo

porque allí

no habitan ángeles.

 

Al final sólo quedamos

yo y tu desprecio

yo y tu mirada vacía

yo y tu silencio asesino

yo y tu recuerdo que fui

quien sostuvo tus olvidos.

 

Entonces nunca me pierdas

                  de vista porque te pierdes:

soy zurdo porque perdono

y derecho porque olvido.

 

 

 

QUEJA DEL POETA

“…la Patria sufriente oía con hastío el verdor eterno”.

Raúl Hernández Novás

 

Este desconocer del odio lento contra mí empujándome hacia las balas

abriendo un precipicio cada vez que camino entre inocentes alabanzas

tendiéndome su trampa de hastío

ciego hastío de poder que cantaba en las reuniones ditirambos

aunque una calurosa mañana de diciembre

se fue escondido en las miasmas de un dragón por considerar a la Patria

sangrante

maldita

indigna

porque cambió a Numancia por una vasija de espanto

y pretendía vivir al otro lado de su rabia

para luego venir a restregarnos sus perfumes exóticos

o quién sabe

si unos pedazos de arcilla calcinada.

Ese mismo fue el que pretendía lanzarme a las mazmorras del llanto

de la ofensa

del rapto

enviándome a sus Guardianes del Orden

como si fueran ediles de la Eterna Inquisición.

Ese que hoy me odia se quitó sus dientes

para mascar las piedras de su maldad

rompiendo ojos que miraban detrás de espejuelos de dolor

aunque sé que no dormirá

hasta verme transido del Apocalipsis

y es ahí donde detendré a mis soldados

para ordenarles lanzar un grito de esperanza.

 

(De Este mundo que habito)

 

 

 

        AÑORANZA

        Tus labios como hilo de grana

          Y tu habla hermosa (...)

                  Cantares 4:3

 

Deseo enterrar muy hondo

el llanto de lo vivido que ya

no podré vivir contigo.

De ti, que mucho me amaste

cuando los años no andaban

anulados por la lumbre

del olvido y la distancia,

guardo en mi mente de ahora

aún deseoso de ti

tus labios como hilo de grana.

 

Y tu habla hermosa quisiera

volver a escuchar un día,

un solo, breve instante,

tener conmigo tu aliento

y de nuevo tu habla hermosa

y tus labios como hilo de grana.

       

 

 

AL QUE TE PIDE UN PAN

 

Quizás la marejada de un octubre

–ciclones enraizados en cardúmenes–

vuelvan a golpear detrás de tus pulmones

y queden bien al sur entre las nubes

zapatos que un día desgastaste

pañuelos de llorar varias quimeras

y otros tantos diciembres sin camellos.

 

Quizás

–y al suponer nada se pierde

  como no sea el aliento de ignorar las madrugadas–

fuese que un lampo de luz ya no te alcanza

para ser perdonado por los ángeles.

 

Porque pediste un pan

–sigo creyendo

  que suponer no es más que una manera

  de renunciar al Sol bajo amenaza–

cuando tenías las hambres de guardar en un bolsillo

y recibiste en pleno rostro las marismas

de andar entre paredes y misterios.

 

Pediste un pan

–quiero decir

  el derecho de tener un corazón como cualquiera

  lleno de pústulas y lodos tan comunes–

y te salió el abismo aquel que ya viviste por obtuso

cuando aún los dientes servían para andar contra las hienas.

 

Ahora no

–qué vas a hacer si en la esperanza

  vence la injuria del que golpea bien profundo

  y resultan mentiras las promesas

  de aguardar panes sin ánimo de lucro–

ahora ya no es tiempo

de permitir a lágrimas y llagas

que vengan a robarte la victoria

y la dulzura de tantos años esperando

porque los panes no sean piedras sino en cambio

se haga el milagro azul que te enseñaron:

por cinco panes ya una vez fue la magia

con cestas llenas de luces y canciones.

 

(De Nosotros, simplemente humanos)

 

 

 

PUENTE DE MANDO

        A otro poeta

 

En realidad no son mis ojos los que faltos

de luz imanente  los que caten

la realidad distorsionada por ciclones

y algunas aves migratorias que cual insectos

planean las herrumbres de los cerros.

 

No es mi pie caminador el que se cansa

ni mis llaves de polvo tras la ruina.

 

Es mi lengua.

Que debiera encerrarse tras las rejas

de una alegría glamorosa

y optimista

en medio del carnaval que es la existencia

en este sol americano que tú llamas.

 

 

 

FELICIDAD

 

Es ver partir la Luna cada noche

y el despertar del Sol cada mañana.

 

Es irradiar paz en la memoria

del colibrí que lloroso pide auxilio.

 

Es caminar por oscuros certenejos

mientras de cada tropiezo nos burlamos.

 

Es alumbrar al ciego que en la esquina

clama de caridad una sonrisa.

 

Es comprender lo milagroso del latido

de nuestro corazón libre de enojos.

 

 

 

HISTORIA UNIVERSAL

 

Alfonso Trece según las estadísticas

medía su gafería con una regla de extraer esquirlas.

Limpiaba personalmente su corona

como todo monarca que adora haber nacido en el puente de mando

y sobre todo

iba al mar a extasiarse con las olas del Mediterráneo.

 

Alfonso Trece tuvo la dicha de salir ileso

de cuantas tropologías le inventaron.

Estuvo en París como Vallejo

hundiendo su bastón de oro los días de nevada

cuidadoso como era de la etiqueta diplomática.

 

Alfonso Trece

–me lo confió Malena Tudor su trigésima bisnieta– 

apagaba sus cigarros con billetes de mil francos.

 

(De Poemas triunfalistas)

 

 

 

RATONES

 

En el universo común

los ratones son tenidos

por depredadores cobardes      y        traicioneros.

No obstante debe aclararse

que en el universo zodiacal

tales características pasan a ser secundarias.

Viven de restos

y ello es la muestra

de que serían los últimos

en extinguirse.

 

 

 

BURROS

 

Nadie podrá convencer a los niños

de la nobleza de estos animales

mientras en los cumpleaños

continúe el juego de poner el rabo

y en las escuelas

les regalen dos orejas enormes

a los más atrasados.

Lo más doloroso

es que esos niños mañana serán hombres.

 

 

 

UNICORNIO

 

No por casualidad

es el último en la línea zodiacal.

Podría parecer reiterativo

y hasta un lugar común

mas cada quien puede elegir en el universo

lo existente o lo inexistente.

El mito podría tomarse como pretexto

para desarrollar imágenes bellas

y edulcorantes.

Lo rechazo.

El unicornio simplemente

porque es lo posible

y eso basta de por sí

para considerar que constituye

lo más hermoso.

 

(De Consulte su horóscopo)

 

 

 

Andrés Casanova (Las Tunas, Cuba, 1949) es narrador, poeta, autor de guiones radiales dramatizados y ha incursionado en la escritura de guiones cinematográficos; miembro de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). Ha obtenido importantes premios nacionales e internacionales y textos suyos han sido publicados en revistas literarias de varios países. Está antologado en diversas selecciones de narrativa y poesía y ha publicado novelas, libros de cuentos, de poesía y ensayos literarios con editoriales de Cuba, México, España, Portugal y Argentina. Reside en Las Tunas, Cuba.

Pueden leerse sus libros más recientes que está publicando de manera exclusiva con la editorial Libros Café Criollo con sede en Estados Unidos en su página de Autor Central en Amazon: 

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Sus blogs literarios se encuentran en:

                                                 https://escritorandrescasanova.wordpress.com

http://andrescasanova.cubava.cu/